Lucía entró " de buen rollo" en la casa hace una semana pero todo parece indicar que los acontecimientos, permitidos y consentidos por Omar, le están volviendo loca. Es totalmente cierto que su actitud puede molestar a Paula pero el aislamiento que vive la joven y las faltas de respeto de la susodicha acaban con la paciencia de cualquiera.
Ayer os contábamos que Omar y Lucía han vuelto a ser pareja. Como es lógico, la reacción de Paula ha sido la normal en estos casos. La joven se ha hundido y afortunadamente ha encontrado apoyo en sus compañeros de concurso que no entienden demasiado bien al rapero de Carabanchel.
Como os hemos contado hoy mismo, ayer entraba en la casa de Gran Hermano Lucía, la exnovia de Omar, para hacer saltar por los aires la relación entre Paula y el antedicho. A pesar de que el rapero parecía estar muy contrariado ya ha cambiado de opinión y se ha acercado a la nueva concursante.
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