Angelina Jolie se somete a la extirparción de los ovarios y de las trompas de Falopio

Angelina Jolie ha escrito un artículo en el New York Times que se ha publicado este martes en el que cuenta que sus médicos le dijeron que unas pruebas habían mostrado marcadores que podían ser un signo de un cáncer en un estadio inicial. Después de la mastectomía preventiva que le fue realizada hace dos años para reducir los riesgos de padecer cáncer, Angelina Jolie -que perdió a su madre, a su abuela y a su tía de esta enfermedad- recibió una llamada de su médico hace dos semanas con los resultados de un reciente análisis de sangre.

«Yo pasé lo que imagino que pasan miles de mujeres que lo han vivido», escribe la actriz, de 39 años. «Me dije que tenía que estar tranquila, ser fuerte y que no había razón para pensar que no pudiera vivir para ver a mis hijos crecer y conocer a mis nietos«, contaba. Angelina llamó a su marido, Brad Pitt que estaba en avión en cuestión de horas. «Lo bonito de esos momentos en la vida es que existe tanta claridad. Sabes para lo que vives y lo que ocurre. Te polariza y es apaciguador», relataba.

El mismo día Jolie fue a ver a la cirujana que había tratado a su madre Marcheline, que fallecía en 2007 de un cáncer de ovarios. «A ella se le llenaron los ojos de lágrimas cuando me vio: ‘Eres como ella'», cuenta la ganadora del Oscar. «Me vine abajo», añade. Esperó otros cinco días para los resultados de una prueba que revelaría si había cáncer en alguna parte de su cuerpo. «Pasé cinco días confundida, asistiendo a los partidos de fútbol de los niños y trabajando para estar tranquila y centrada», confiesa.

No fue decisión fácil por parte de la actriz porque la extirpación de los ovarios lleva a una menopausia forzada Finalmente llegaron los resultados y supo que la prueba era negativa. «Estaba llena de feliciad, aunque el marcador radioactivo significaba que no podía abrazar a mis hijos», escribe. «Existía aún una posibilidad de cáncer en una etapa temprana, pero era menor en comparación con un tumor en toda regla. Para mí fue un alivio, todavía tenía la opción de eliminar mis ovarios y las trompas de Falopio y elegí hacerlo«. No fue decisión fácil por parte de la actriz porque la extirpación de los ovarios lleva a una menopausia forzada.

«Lo más importante es que aprendes sobre las opciones y eliges lo que es correcto para ti en concreto», cuenta y explica que estaba previsto hacer esta cirugía en algún momento en el futuro porque sus médicos se lo recomendaron. «El cáncer de mi madre le fue diagnosticado con 49 años, yo tengo 39″, escribe.

La cirugía reveló que la actriz tenía un pequeño tumor benigno en uno de sus ovarios sin signos de cáncer en otros tejidos. Ella optó por mantener su útero porque no existe un historial de cáncer de útero en su familia. «Independientemente de los reemplazos hormonales que estoy tomando, ahora estoy en la menopausia«, reconoce. «No podré tener más hijos, y espero que se produzcan algunos cambios físicos. Pero me siento a gusto con lo que vendrá, no porque yo sea fuerte, sino porque se trata de una parte de la vida. No hay nada que temer», relata.

«El hecho es que sigo siendo propensa al cáncer», asegura y escribe que está buscando maneras naturales para fortalecer su sistema inmunológico. «Sé que mis hijos nunca tendrán que decir: ‘Mamá murió de cáncer de ovario'».

Vía | People
Foto | Gtres

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