Raquel Bollo amenaza con abandonar Gran Hermano VIP 4 tras la entrada de Aguasantas

Raquel Bollo recibía anoche a la tercera cliente -junto a Kiko Matamoros y Víctor Sandoval– en el balneario VIP que no era otra que su «exnuera» y segunda finalista de la edición del pasado año del reality show, Aguasantas.

Al principio la andaluza intentaba ser profesional y cumplir con la prueba sin dejar que sus sentimientos interfirieran, pero era cuestión de minutos para que la situación fuera tan tensa que Bollo quisiera abandonar. Jordi González tenía que manejar la situación en mitad de la entrevista al expulsado de la noche Javi Tudela.

De la entrevista se pasaba al confesionario donde Raquel Bollo lloraba desconsoladamente y decía que se quería marchar porque no deseaba que se hablara con su hijo. Explicaba que este está en otro mundo y que no quiere saber nada de la televisión y el corazón. El súper le decía que serían solo unos días y que la joven se marcharía, pero la colaboradora de Sálvame no entraba en razón.

Además descubríamos que del exterior le había llegado una información vital para su concurso. Raquel se enteraba de que fuera se piensa que no está haciendo nada, vamos, que es un mueble más de la decoración de Guadalix, y entre sus lloros aparecía una motivación más fuerte que su hijo, ella misma y la imagen que está dando en el exterior. La ex de Chiquetete comentaba que su impresión sobre su paso por el reality era totalmente contraria a la del público.

Pero como no querían que se fuera, su hijo, Manuel Cortés entró por teléfono y le aseguró que él estaba bien y que no debía marcharse. Al final, Bollo acabó trasmitiendo su gran preocupación a su hijo: lo que se está viendo de ella en el exterior y el joven tiraba de un argumento típico y le decía que los que están viendo el 24 horas saben cómo está viviendo el concurso. Este tema promete varios encontronazos y crisis más.

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