Jesulín de Ubrique visitó a su hija en casa de Belén Esteban

Es curioso, y sintomático, que la persona que comenta estar harta de la prensa haga todo lo necesario no sólo para que la misma esté presente en la puerta de su casa sino para que, por si se le olvida o no se ha enterado, esté informada de lo que va a suceder.

Belén Esteban anunció a bombo y platillo que Jesús Janeiro iba a visitar a su hija el sábado tras su corrida de toros en una localidad cercana a Paracuellos, lugar donde reside la televisiva colaboradora. Imaginamos que usar a la prensa como testigo del tiempo que tardó el diestro en casa de la citada es la idea de la Esteban que luego se queja cuando, sin trincar, alguien intenta entrevistarla.

El padre de Andrea Janeiro estuvo dos horas con ella en su domicilio. No acudió a verla su tío Víctor que emprendió el viaje a Ubrique nada más terminar el festejo taurino que toreó con su hermano. El diestro aparcó su coche en el garaje interior de la casa de la Esteban y luego pasó a la puerta principal de la vivienda.

La Esteban y Fran decidieron marcharse con anterioridad y dejar a la niña con su abuela. «Yo me voy para que no sea todo tan incómodo porque aquí lo principal es mi hija y es por lo que hay que mirar. Mi casa está abierta para todo el mundo, para él y para todo su familia».

Esta última frase es un claro ejemplo de un nuevo brindis al sol y de la demagogia que maneja como nadie la de San Blas. Esto es como suelen decir los alcaldes de las ciudades cuando dicen eso de «Madrid está abierto para todo el que quiera venir» pero a mi casa que no vengan porque yo ni les recibo ni estaré.

Ya tiene la Esteban cuerda para el arranque de la semana. Imaginamos que sus palmeros ya estarán felices lo que ignoramos es qué va a contar exactamente del encuentro cuando ella no estuvo presente.

Vía | Sur
Foto | Gtres

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