El príncipe William y su chulería a la hora de construirse un nuevo palacio

El príncipe William de Inglaterra ha decidido construirse su enésimo palacio, pero lo ha hecho demostrando que es un Windsor y que nobleza obliga.

Lo de arramblar con todo y poner cara de tonto es algo que ha hecho su familia a lo largo de los siglos. Ahora, él y Kate han decidido tener un inmueble en Fort Lodge donde respirar tranquilos. El problema reside en que en la zona ya había familias viviendo. Pues bien, William ya les ha dicho que se vayan de allí. Una fuente comenta que «se les ha dicho que se muden de forma forzosa. Imagino que les habrán dado dinero o algún otro sitio para irse, pero ellos no esperaban tener que cambiar su vida tan de repente. Las casas estaban demasiado cerca de la de William y no van a vivir al lado de ningún Tom, o de ningún Harry».

Una fuente oficial indica que William se ha gastado parte del dinero que le pagan los británicos en indemnizar a todos sus vecinos con la condición de que se vayan. Es curioso que le molesten como vecinos, pero no cuando le pagan el sueldo. El precio que habrían pagado en total por la casa sería de unos 21 millones de euros. Lo que buscan es un remanso de paz donde Kate y su familia puedan tener una vida más tranquila y acorde a las necesidades de Middleton. Habrá que ver si alguno de los expulsados no termina por comentar detalladamente qué ha sucedido con ellos.

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